La Reserva de la Biósfera de Sian Ka’an, que en maya significa donde nace el cielo, es un espacio natural protegido desde que en 1987 la UNESCO declarara Patrimonio de la Humanidad, por su gran diversidad de flora y fauna y la enorme extensión que abarca, más de 650 mil hectáreas de selva, que va desde Tulum a Carrillo Puerto, dos municipios de Quintana Roo.
Hay diferentes accesos por los que fácilmente puedes entrar a la Reserva y explorar los maravillosos secretos que la naturaleza nos tiene reservados, uno de ellos es Tulum, sobre la carretera rumbo a Boca Paila a tres kilómetros del pueblo llegas a la caseta de entrada a la Reserva, donde te darán información para poder tener un paseo más agradable. No hay un medio de transporte designado para llegar ahí, por lo que tienes que valerte de taxis o carros particulares si quieres algo más particular, o bien, pedir información sobre los autobuses que llevan a los trabajadores del pueblo a los restaurantes y hoteles de las cercanías, aunque ir a pie es una opción considerable, ya que la distancia no es muy grande.
Debes recordar que es un área protegida, por lo tanto, no vas a encontrar tiendas, restaurantes o hoteles en el lugar. De hecho, el mayor atractivo es el ecoturismo. Puedes nadar en el río y apreciar la belleza interna de la selva, observar el mangle que crece en sus orillas, si tienes suerte podrás ver algún manatí en su entorno natural o animales arborícolas como monos y tejones, al igual que especies de aves y peces que difícilmente podrás encontrar en un entorno más exótico.
Recomendaciones para el viajero:
1) Lleva agua y comida suficiente ya que no encontrarás un lugar para proveerte de provisiones en un lugar cercano.
2) El repelente de mosquitos no está de más, sobretodo por el clima imperante, la humedad es un elemento que hace que proliferen estos insectos.
3) Ropa adecuada. Es recomendable llevar más de una muda de ropa, pues si lo que quieres es explorar la selva, es mejor ir con zapatos cómodos y, si se puede, deportivos o botas especiales para viajeros. Pero si decides nadar un rato después de la exploración, ropa ligera es más agradable.
4) Investiga, infórmate y consulta. El territorio de la Reserva de la Biósfera es muy extenso y con una densa vegetación, por lo que podrías perderte si no conoces bien los caminos. Así que sería excelente que consultes a un guía especializado.
Adéntrate a esta maravillosa reserva que tiene para ti las mejores experiencias naturales. Es ideal para los que quieran practicar el ecoturismo y para quienes quieran entrar en contacto más íntimo con la naturaleza y los beneficios que nos da.