La Marquesita, una deliciosa creación yucateca

La Marquesita, una deliciosa creación yucateca

 

La Marquesita es uno de los bocadillos más populares y representativos de Yucatán, fue creado en 1937 por Vicente Mena Muñoz, quien le dio el nombre en honor a su esposa, a quien él llamaba su “marquesa”.

La Marquesita es una barquilla dulce rellena de queso holandés, para este año cumplirá 78 años de haber sido creada, y permanece como uno de los bocadillos más populares y representativos del Estado.

La Marquesita fue creada en 1937 por Vicente Mena Muñoz, mejor conocido como “Polito”, un fabricante de sorbetes que se vio en la necesidad de usar la creatividad para sortear los tiempos en los que sus ventas bajaban de manera drástica, según su nieto Víctor Jesús Mena Bates.

“Mi abuelo tenía muchos encargos de helados en la época de calor, pero cuando las temperaturas bajaban los clientes también, razón por la que empezó a idear algunas alternativas para squienes dejaban de consumir los helados por semanas o meses”, comentó.

Vicente Mena Muñoz es conocido como “Polito” porque junto con su padre, quien se llamaba Leopoldo Mena Bobadilla, salía a vender en un carrito de fierro de tres ruedas que tenía la leyenda “Helados Polo”.

Con los años, “Polito” emigró del municipio de Teya a la capital yucateca y solía tener clientes en las zonas de mayor poder adquisitivo de esta ciudad, pero en las temporadas de frío “la caída de sus ventas era abrumadora”, refirió.

“Polito” elaboraba sus propias barquillas para sus helados, era sorbetero y barquillero y entonces empezó a crear una especie de barquilla que pudiera servirse caliente y con algún tipo de relleno.

Desde esa época, el queso holandés (tipo Gouda) era muy consumido por los yucatecos, entonces decidió rellenar sus barquillas con ese producto, arrollarla en una forma de taco y empezó a venderlas sólo como barquillas o miniaturas de bocadillos con queso.

El éxito fue casi inmediato y quienes las probaban le preguntaron a “Polito” cémo se llamaba ese postre, indicó. “Él estaba muy enamorado de su esposa doña Carmen Muñoz, de quien se expresaba como ‘su marquesa’. Él se presentaba como el marqués Polito y su marquesa Carmen, por lo que en honor a ella decidió bautizarlas como marquesitas”, detalló.

En sus primeros días, el bocadillo medía aproximadamente 10 centímetros y el barquillo era más duro, pero a sugerencia de doña Carmen, Polito agrandó el tamaño del barquillo, lo que lo hizo más delgado.

Hoy día la presentación del bocadillo es de casi 20 centímetros de largo y es mucho más suave, sin dejar de ser crujiente. Tienen la apariencia de una flauta rellena de queso.

El hijo de don Vicente y padre de Víctor Jesús Mena, Vicente Mena Heredia, de 84 años, fue el heredero y encargado de darle continuidad a la venta de las marquesitas en un local ubicado en el Mercado Santos Degollado, en el Barrio de Santiago de esta capital.

“Mi padre siguió con la tradición y hasta hoy somos de los pocos, o quizá los únicos, que nos mantenemos como sorbeteros y barquilleros. Desde siempre hemos fabricado nuestras barquillas y son las mismas que usamos desde hace 77 años para elaborar nuestras marquesitas”, dijo.

La familia Mena ha tenido entre sus clientes a personalidades como el ex presidente de Estados Unidos George W. Bush y los actores William Levy, Angelique Boyer, Rogelio Guerra y Aracely Arámbula, entre otros muchos.

La fórmula original de las marquesitas de “Polito” está patentada y esa patente se comercializó ya en otros puntos del estado y fuera de la entidad.

Incluso, los creadores ofrecen capacitación a gente de otras entidades interesadas en vender las marquesitas que entre sus ingredientes básicos están la leche condensada, leche en polvo, un preparado especial con caramelo y harina.

Hoy día hay muchos vendedores, sobre todo ambulantes, que tratan de imitar la fórmula original de la familia Mena, “ante la pasividad de muchas autoridades que han permitido la proliferación de estos puestos que hacen bocadillos sin la calidad e higiene necesarias”, lamentó Víctor Mena.

En la actualidad existen muchos vendedores ambulantes de marquesitas, que, si bien se han hecho populares por todos los alrededores del estado tanto en parques como lugares concurrentes en donde no puede faltar un vendedor de marquesitas, también han innovado la marquesita, agregándole más sabores como lo son la famosa y rica crema de avellana, cajeta, queso crema, mermelada, entre infinidad de sabores, ¡claro! sin quitar el tradicional queso Gouda, o como los yucatecos le decimos, el queso de bola.

Así que si no has probado las marquesitas, ¿Qué esperas? pruébalas y deléitate con su delicioso y único sabor.

Con información del informador.com

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